El mercado de Abastos actual de Toledo tiene sus antecedentes en un edificio de planta rectangular del siglo XVI, que se asentaba en el mismo solar. En 1896 el Arquitecto municipal presentó un proyecto para un nuevo mercado, con materiales innovadores propios del momento: Hierro, mármol, cerámicas vidriadas, ladrillo fino, teja plana y vidrios deslustrados. Se levantaron, en parte, las paredes y se trazó la distribución interna; pero la obra no llegó a terminarse.