Malcom III fue rey de Strathclyde o de Cumbria a partir del 25 de abril de 1058, coronado en la abadía de Scone, en Perthshire, y sepultado en la abadía de Dunfermline junto a su segunda esposa. Era hijo de Duncan I (1010-1040, asesinado por Macbeth y con él subió otra vez al trono la Casa de Moray o de Atholl).