San Ángel fue un santo católico nacido en Palestina. Vivió en el Monte Carmelo y viajó a Roma en compañía de otros carmelitas para obtener del papa Honorio III la aprobación de la Regla del Carmen, gracia que se obtuvo el 30 de enero de 1226. Por los años 1220, llegó a Sicilia. Aquí desarrolló un ardoroso apostolado y en la ciudad de Licata (Sicilia-Italia) fue asesinado por "impíos infieles", en la primera mitad del siglo XIII.