El Ultimátum británico de 1890 fue un ultimátum del gobierno británico de Lord Salisbury entregado el 11 de enero de 1890 mediante un "Memorando" al gobierno portugués, conminándole a retirar sus fuerzas militares existentes en el territorio comprendido entre las colonias de Mozambique y Angola, en las actuales Zambia y Zimbabue, con el pretexto de un incidente ocurrido entre portugueses y macololos, pero realmente por instigación del magnate de los diamantes sudafricano Cecil Rhodes.