El Tratado de Cielos Abiertos entró en vigor el 1 de enero de 2002 y actualmente cuenta con 34 Estados Miembros. Establece un programa de vuelos de vigilancia aérea sin armamento sobre el territorio de todos los países participantes. El tratado está diseñado para mejorar el entendimiento y confianza entre todos los participantes, independientemente de su tamaño, mediante la obtención de información sobre los efectivos y operaciones militares que puedan afectarles.