Tom Mann fue un sindicalista y líder socialista y comunista británico, hijo de un librero. Solamente pudo pasar tres años escolarizado, marchando inmediatamente a trabajar en las minas Victoria Colliery. Niño profundamente religioso, se trasladó a Birmingham con su familia, en donde de forma autodidacta aprendió rudimentos de ingeniería. Con 21 años abandona Birmingham y marcha a Londres en busca de trabajo, periodo que coincide con una profunda depresión económica.