La historia de los Testigos de Jehová en el nacionalsocialismo está dominada por el conflicto con las autoridades nazis, entre otras cosas debido a su objeción de conciencia a prestar servicio militar y utilizar el saludo fascista. Durante el dominio del nacionalsocialismo del 30 de enero de 1933 al 8 de mayo de 1945, los Testigos de Jehová fueron perseguidos.