El Sistema Nacional de Salud cubano depende del Ministerio de Salud Pública de Cuba, que es el organismo encargado de dirigir, ejecutar y controlar la aplicación de la política del Estado referente a la salud pública. La Constitución de la República de Cuba señala en su artículo 50: Todos tienen derecho a que se atiendan y proteja su Salud. El Estado garantiza este derecho.