Samuel Herman Reshevsky, jugador de ajedrez, fue uno de los más fuertes grandes maestros de América y del mundo. Aprendió a jugar a la edad de 4 años y fue un niño prodigio del ajedrez. A la edad de 8 años ya derrotaba a experimentados jugadores de más edad en exhibiciones simultáneas. En la década de 1920 sus padres se trasladaron a los Estados Unidos donde se ganaron la vida con el talento de su hijo.