La Sala Rock-Ola de Madrid fue un bar de copas y actuaciones en directo que constituyó uno de los centros neurálgicos de la llamada movida madrileña entre 1981 y 1985. Entre sus muros dieron sus primeros pasos grupos como Alaska y Dinarama, Nacha Pop, Los Secretos o Radio Futura entre otros, visitando también el local para actuar grupos internacionales como Spandau Ballet o Depeche Mode.