La Riada de Santa Teresa fue la inundación que tuvo lugar el 15 de octubre de 1879 en la cuenca del río Segura, la que hasta la fecha cuenta con los registros más altos de caudal en las ciudades de Murcia y Orihuela. Las precipitaciones fueron muy copiosas en Murcia, Almería y Alicante. Se estima que en la cabecera del Guadalentín llegaron a caer 600 mm en tan solo una hora, intensidad rara vez alcanzada en un episodio torrencial.