El Reino Unido fue el tercer país (tras Estados Unidos y la Unión Soviética) en probar y desarrollar armas nucleares de manera independiente a partir de octubre de 1952. Es uno de los cinco Estados con armas nucleares reconocidos bajo el Tratado de No Proliferación Nuclear, que ratificó el Reino Unido en 1968. Actualmente, conserva un arsenal de alrededor de 160 ojivas nucleares operativas y 225 ojivas en total.