El palacio de Larrinaga es un edificio de Zaragoza de principios del siglo XX que, cuando fue construido, se encontraba alejado del casco urbano pero que, actualmente, se encuentra plenamente integrado en él. De él, Jesús Martínez Verón dice "Es el mejor ejemplo de eclecticismo zaragozano entre 1885 y 1920. Constituye, por entidad y calidad en la ejecución, una de las mejores residencias burguesas levantadas en Aragón. "Jesús Martínez Verón, Arquitectura aragonesa: 1885-1920.