El Palacio de Altamira de Sevilla se encuentra situado en el barrio de San Bartolomé del casco histórico de la ciudad, en la calle Santa María la Blanca, lindando también con la calle Céspedes y la barreduela Dos Hermanas a la que da acceso, un sector muy transitado, próxima a una de sus más tradicionales puertas de entrada, la puerta de La Carne, que tras la reconquista quedó dentro de la aljama judía, una zona de gran actividad económica.