Se llama Padres de la Iglesia a un grupo de pastores y escritores eclesiásticos autodidactas, obispos en su mayoría, de los primeros siglos del cristianismo, cuyo conjunto doctrinal es considerado fundamento de la fe y de la ortodoxia en la Iglesia Católica. Para el protestantismo sin embargo, el valor de los escritos patrísticos son eminentemente testimoniales, corroborativos en tanto y cuanto se sometan a una sólida exégesis de las Escrituras.