Sidi Mohámmed III ben Abdel·lah al-Jatib fue el sultán de Marruecos desde 1757 a 1790. Miembro de la dinastía alauí sucedió oficialmente a su padre al fallecer este en 1757, aunque había compartido las tareas de gobierno desde 1746. Su reinado no contó con una capital oficial aunque hizo construir un gran palacio en la ciudad de Rabat, a la que confirió el rango de capital imperial.