Miguel de Adán fue un escultor y retablista español de los siglos XVI y XVII. Discípulo de Juan Bautista Vázquez el Viejo, su actividad artística se desarrolló principalmente en Sevilla, ciudad en la que el 1 de diciembre de 1588 formó parte del tribunal examinador que acreditó la suficiencia en escultura y diseño de retablos del entonces aspirante Juan Martínez Montañés.