Miguel III, apodado el Beodo, Emperador romano de Oriente, desde 842 hasta su muerte, tercero y último de la dinastía amoriana. Nieto de Miguel II, sucedió a su padre Teófilo como emperador bizantino cuando sólo contaba con tres años de edad. Durante su minoría, el Imperio fue gobernado por su madre Teodora, que a pesar de las derrotas que sufrieron sus generales, consiguió mantener las fronteras frente a los musulmanes de Bagdad y Creta.