Se conoce como Masacre del Perejil a la ordenada por el presidente dominicano Rafael Leónidas Trujillo. En octubre de 1937 Trujillo ordenó a sus tropas la erradicación masiva de la población de origen haitiano que residía en el territorio dominicano, particularmente en las fincas agrícolas situadas a lo largo de la Frontera entre República Dominicana y Haití.