Mary Philbin fue una actriz cinematográfica de la era del cine mudo. Philbin es probablemente más recordada por su papel de Christine Daaé en la película de 1925 El Fantasma de la Ópera, frente a la leyenda de la pantalla Lon Chaney, y por el de Dea en The Man Who Laughs. Ambos papeles correspondían a historias del tipo de La bella y la bestia.