Luis Carrillo de Toledo fue un noble, militar y hombre de estado español, marqués de Caracena desde 1606, conde de Pinto desde 1624, comendador de Montizón y de Chiclana en la orden de Santiago, general de los tercios de Flandes, gobernador de Galicia, virrey de Valencia y presidente del Consejo de Órdenes durante el reinado de Felipe III y consejero de estado de Felipe IV.