Liciniano fue arzobispo de la Diócesis Cartaginense durante la dominación bizantina de Cartagena, entonces llamada Carthago Spartaria. Tenemos varias noticias de Liciniano sobre todo por Isidoro de Sevilla, que lo alabó en De Viris Ilustribus y en Descriptoribus Ecclesiasticis. Es autor de varios escritos de carácter teológico y de influencia platónica y agustiniana, de los que sólo se conservan tres cartas. Epístola al Papa Gregorio Magno. Epístola al Diácono Epifanio.