El león de Citerón era una fiera que azotaba los rebaños de Beocia y fue matado y desollado por Heracles. Ésta es una de las primeras hazañas de Heracles. Del león no está escrito que tuviera alguna capacidad especial, a diferencia del terrible León de Nemea, y por ende Heracles le dio fin por medios convencionales, pero sólo después cincuenta días intentando darle caza.