Las Leyes de Neutralidad son una serie de leyes aprobadas por el Congreso de Estados Unidos en la década del 30 en respuesta a la creciente conflictividad en Europa y Asia que llevaría eventualmente a la Segunda Guerra Mundial. Fueron generadas por el fuerte sentimiento aislacionista en Estados Unidos que siguió a su costosa participación en la Primera Guerra Mundial y sancionadas para asegurar que EEUU no se viera nuevamente involucrado en conflictos externos, especialmente en Europa.