James Earl Ray fue declarado culpable del asesinato de Martin Luther King, Jr, ocurrido el 4 de abril de 1968. James Earl Ray proviene de una familia pobre del oeste medio de EEUU. Abandonó los estudios a los 15 años y sirvió al ejército en Mongolia. Después de varios delitos fue condenado a 20 años de prisión, por ser un delincuente habitual. Su padre y hermanos también purgaron condenas en prisión por actos delictivos.