Las Híades en la mitología griega son las ninfas hacedoras de lluvia, al menos esto es lo que parece que significa su nombre. En un principio las Híades eran unas estrellas que aparecen en primavera; de las que se decía habían sido unas ninfas transformadas por Zeus en constelación por los grandes servicios que realizaron cuidando a Dioniso. En la mitológica comarca de Nisa, tendieron al niño Dioniso, entregándoselo posteriormente a Ino.