Albert François Cevert Goldenberg fue uno de los pilotos más coloridos de principios de los 70. Pocos supieron mostrar ese talento que tenía en la Fórmula 1 de aquella época, y nadie termino su carrera de forma tan dramática como Cevert, hijo de un joyero parisino y cuñado del también piloto de Fórmula 1 Jean Pierre Beltoise.