Francisco Antonio de Guerrero y Torres, arquitecto barroco mexicano. Fue el más notable cultivador del estilo dieciochesco en la capital de la Nueva España, traduciendo el rococó galante a un lenguaje mexicano. Fue aprendiz de Lorenzo Rodríguez. Participó, en 1753, en obras de construcción del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, sin embargo, en ese proyecto el arquitecto principal fue Pedro de Arrieta.