Los hermanos Emilio y Duncan Wagner fueron dos franceses que hacia 1930 propusieron la hipótesis de la existencia de la Civilización Chaco-Santiagueña, apoyándose en descubrimientos arqueológicos efectuados a principios del siglo XX en la provincia de Santiago del Estero, en la región de Icaño y los departamentos Avellaneda, Matará y Robles.