En la geografía antigua, según las fuentes de la Antigua Roma, Dacia era la tierra habitada por los dacios y getas, las ramas del Norte-Danubio de los tracios. Dacia se hallaba en medio de los Cárpatos y estaba delimitada: al sur, aproximadamente, por el río Danubio (Danubius e Istros en fuentes griegas), o, más probablemente, por el monte Hemo (en los Balcanes). Mesia, una región al sur del Danubio, fue el área central de habitación de los getas y su interactuación con los antiguos griegos.