La Basílica de los Cuatro Santos Coronados (en italiano, Santi Quattro Coronati) es una antigua iglesia romana. Data del siglo IV o V, y está dedicado a cuatro santos y mártires anónimos. El complejo de la basílica con sus dos patios, el Palacio Cardenal fortificado y la capilla de San Silvestre, y el Monasterio con su claustro estilo cosmatesco se alza en una parte verde y silenciosa de Roma, entre el Coliseo y San Juan de Letrán, en una ambientación propia de otra época.