Corocotta fue un personaje de la Antigüedad, cuya existencia se conoce únicamente por una sola cita, del historiador romano Dión Casio que, según la traducción más difundida, la de Adolf Schulten, reza así: Irritóse tanto [Augusto Augusto] al principio contra un tal Corocotta, bandolero español muy poderoso, que hizo pregonar una recompensa de doscientos mil sestercios a quien lo apresase; pero más tarde, como se le presentase espontáneamente, no solo no le hizo ningún daño, sino que encima le regaló aquella suma.