Constante II, hijo de Constantino III Heraclio y nieto de Heraclio, fue Emperador bizantino desde 641 hasta su muerte en 668. Suele considerarse el reinado de Constante II como la transición definitiva entre la Antigüedad Tardía y la Edad Media en el ámbito bizantino; así como uno de los periodos de la historia bizantina en el que el Imperio tocó fondo, viendo como sus fronteras retrocedían en todos los frentes.