La Concordia de Alcañiz fue un acuerdo al que llegaron el 15 de febrero de 1412 los representantes de la Generalidad de Aragón, reunidos en Alcañiz, y de la de Cataluña, reunidos en Tortosa, para establecer un procedimiento u hoja de ruta destinado a elegir al sucesor de Martín I de Aragón a su muerte sin heredero.