Un Circuito Integrado para Aplicaciones Específicas (o ASIC, por sus siglas en inglés) es un circuito integrado hecho a la medida para un uso en particular, en vez de ser concebido para propósitos de uso general. Se usan para una función especifica. Por ejemplo, un chip diseñado únicamente para ser usado en un teléfono móvil es un ASIC.