El Castillo Real de Chambord, en la región de los Países del Loira, es uno de los castillos más reconocibles en el mundo debido a su arquitectura renacentista francesa muy distintiva que mezcla formas tradicionales medievales con estructuras clásicas italianas. Es el castillo más grande de los Castillos del Loira, pero fue construido para servir sólo como un pabellón de caza para el rey Francisco I, quien mantuvo sus residencias reales en el Castillo de Blois y en el Castillo de Amboise.