La denominación popular caso del metílico designa un brote de intoxicación alimentaria acaecido en España, principalmente en Galicia y en las islas Canarias, durante la primavera de 1963, por consumo de bebidas alcohólicas elaboradas a partir de alcohol metílico, con el resultado de 51 fallecidos y 9 personas ciegas, aunque se estima que la cifra real de muertos pudo contarse por millares.