El carnaval fue introducido a Tlaxcala por los colonizadores españoles desde el siglo XVII. De hecho, en 1699 el entonces gobernador de la Provincia, el Duque de San Román, emitió un Auto en el cual prohibía a los danzantes burlarse de personalidades locales y ordenó que el edicto se pregonara en los idiomas náhuatl y español. Este documento se encuentra en las oficinas del Archivo Histórico de Tlaxcala.