Se trata de un fragmento de una placa de bronce (de 22.5 x 18.1 centímetros y 3 milímetros de espesor) hallado de forma fortuita en Novallas, concretamente en el yacimiento de la Plana (por las Navillas), que data de la segunda mitad del siglo I de nuestra Era, fecha posterior a la presumible del bronce.