Los atentados terroristas a las embajadas de los Estados Unidos en África tuvieron lugar el 7 de agosto de 1998 en Nairobi, y en Dar es Salaam, siendo el objetivo principal las embajadas del país norteamericano. Estos ataques, cuyos autores estaban vinculados al grupo terrorista Al-Qaeda, llevaron a que Osama bin Laden, líder del grupo, fuera incluido en la lista de los diez fugitivos más buscados del FBI.