Arturo I de Bretaña nació en la ciudad de Nantes, el 29 de marzo de 1187, hijo póstumo de Godofredo, cuarto hijo varón de Enrique II de Inglaterra, y de Leonor de Aquitania. Fue proclamado duque de Bretaña por los grandes en 1196, ducado asociado a su madre, que era la duquesa heredera. Fue educado en la corte de Felipe Augusto, que le protegió de la codicia de su tío Ricardo Corazón de León.