Afonso Paiva, nacido João Afonso de Aveiro, fue un explorador portugués al servicio del rey D. João II que le envió en 1487 como acompañante de Pêro da Covilhã, a un viaje de incógnito a Oriente para recoger información sobre las rutas comerciales. Afonso murió de peste en algún lugar de Etiopía, apenas dos años y medio después, sin lograr hacer llegar informes sobre su expedición. Pêro da Covilhã tuvo más suerte y completó el cometido, aunque tampoco regresó nunca más a Portugal.