La Abadía de Essen (Stift Essen) fue fundada en 845 por el noble sajón Altfrid, más tarde obispo de Hildesheim y santo. La primera abadesa fue una pariente suya, Gerswit. A causa del apoyo que ejerció la Dinastía Sajona de emperadores del Sacro Imperio, la abadía pasó a ser "reichsunmittelbar" en algún momento entre 874 y 947. Tuvo su apogeo a partir de 973, bajo el gobierno de la abadesa Mathilde II, nieta de Otón I de Alemania, familia que gobernó la abadía hasta 1011.